¡Muchísimas gracias! Gracias por haber querido contar conmigo para esta “entrevista”. Me hace especial ilusión, así que antes de nada gracias por la OPOrtunidad.

Como bien decís, el nombre que utilizo en Instagram es el de @Opodramática. Decidí utilizar el prefijo “opo” porque mi intención al abrir la cuenta era conocer a otras personas que opositaran y esta es una forma como de reconocernos entre todos. Por su parte, decidí continuarlo con “-dramática” porque creo que el drama es mi pan de cada día. Siempre he sido una persona torpe y con mala suerte pero que al fin y al cabo ha aprendido a darle un toque “ácido-humorístico” a todo lo anterior.

Opodramática es oposiciones, humor y sobre todo, realidad.

Me estoy preparando la Oposición a Carrera Judicial y Fiscal. Yo comencé Derecho con la idea de terminar siendo abogada porque es una profesión que me encanta, pero a partir de tercero de carrera comencé a conocer la figura del Fiscal y ya empezó a llamarme la atención. En cuarto pude hacer prácticas en los Juzgados y me terminé de enamorar por completo del Ministerio Fiscal. Si he elegido esta oposición es porque me apasiona ese trabajo.

Llevo opositando 2 años, 5 meses, 1 semana, 3 días, 6 horas, 20 minutos y 15 segundos... Pero lo llevo bien. Con naturalidad. No me obsesiono mucho 😂.

He ido al test (es el primer examen de mi oposición) en dos ocasiones. La primera fui simplemente a ver el examen, a conocer el procedimiento y todo eso. No llevaba ni un año y por supuesto suspendí.

El año pasado me volví a presentar con 0 expectativas ya que la nota de corte está muy alta y me faltaba por estudiar todavía 1/3 del temario. Además, el mes de antes tuve un pequeño susto de salud que me hizo olvidarme por completo del examen cuando tendría que haber estado centrada en él al 100 %. Sin embargo todo quedó en un susto y a pesar de que tenía poquitas posibilidades, fui al examen a darlo todo y sobre todo a aprender para el siguiente año. Aprobé (aunque no pasé el corte para el siguiente examen) y me di cuenta de que sabía más de lo que pensaba pero que necesitaba mejorar la seguridad tanto en mí misma como en los conocimientos que he ido adquiriendo. De experiencias así siempre se aprende y por ello siempre recomiendo ir a los exámenes aunque todavía no estés preparado para pasarlos.

Dedico 6 días a la semana únicamente a la Oposición. Ahora mismo es mi único trabajo (risas).

Yo siempre digo que la oposición es un modo de vida y que como tal, tienes que adaptar todas tus circunstancias a la misma. La vida familiar/personal es una de esas circunstancias que has de amoldar a tus nuevos horarios y rutinas y eso a veces es difícil porque no depende solo de ti. A mis amigas las veo poquito porque ahora vivimos en sitios distintos, pero siempre encontramos la manera de vernos antes o después.

Es imprescindible, bajo mi punto de vista, tener claro desde un primer momento que quieren dedicarse a la judicatura o fiscalía y que están dispuestos, para ello, a pasar por esta oposición. Ya tendrán tiempo de dudar a lo largo del camino, pero si parten de una base inestable, creo que tendrán más dificultades a la hora de encontrar la luz en los momentos de bajón.

Opino que no hay una “verdad absoluta” para esto ya que las dificultades de las oposiciones dependen también de la personalidad de cada uno. Conozco a gente que lo que más duro se le hace es la incertidumbre de no saber cuándo aprobarán. Yo sin embargo pienso que lo que más me está costando es memorizar con tanta literalidad y sobre todo mantener una rutina de estudio.

Mi día a día suele ser un desastre 😂 😂.

Soy un poco el prototipo de “antiopositora” y como ya he dicho antes, me cuesta muchísimo mantener una rutina de concentración plena.

No obstante, con el tiempo, he aprendido a madrugar (antes era incapaz de ponerme a estudiar temprano) y dedicarle unas 5 horas de estudio hasta la hora de comer. Los primeros días de la semana suelo rendir bastante poco, pero aun así me siento en la mesa las horas que tenga que hacerlo. A partir de las 13.30 h., la cabeza ya se me empieza a ir y aprovecho para hacer la comida, sacar al perro o mirar Instagram. He de decir que pierdo muchísimo tiempo con Instagram (no voy a decir cuánto por si acaso me lee mi preparador 😂) así que utilizo aplicaciones de bloqueo para evitar mirarlo durante el tiempo de estudio.

Mi momento favorito del día es comer (porque comer me hace muuuuuuy feliz) y después echarme la siesta 😂. Es más, cuando me suena la alarma por la mañana, lo primero que hago después de posponerla 5 minutos es pensar en la siesta que voy a pegarme más tarde. Después de la siesta meriendo algo rápido y me pongo a estudiar otras 3 h.

Los días antes del cante (que es el examen que hago con el preparador) aprovecho que rindo más para echar más horas. Incluso a veces hago turno de noche y estudio un par de horas antes de acostarme.

Mi organización también es un desastre, para qué nos vamos a engañar 😂. A pesar de que a principios de semana intento distribuirme bien las temas y las horas, al final, acabo haciendo lo que me va apeteciendo (y eso implica comenzar con los temas más fáciles y 2 días antes del examen encontrarme con 3 temas sin subrayar, 1 tema de 239823908 artículos sin mirar, otro tema perdido en el limbo y un caimán merendándose mis resúmenes en la mochila).

Creo que no soy nadie para dar consejos sobre cómo ser la opositora perfecta porque francamente no lo soy. Es más, me considero muy antiopositora perfecta 😂. Soy de concentración caprichosa, no tenía hábito de estudio en la carrera, me cuesta horrores memorizar... Sin embargo pienso que todos somos personas aptas para opositar desde el momento que decidimos dar este paso. Quizás nos cueste un pelín más que a otros, pero ¿y qué? Lo importante es querer luchar por el trabajo que nos apasiona, sentarnos todos los días visualizándonos con un aprobado entre las manos y saber sobreponernos a cada una de las dificultades que se nos plantean. Es la actitud, y no la aptitud, la que determinará el éxito de nuestros objetivos.

Mi oposición consta de tres pruebas eliminatorias:

• Un examen tipo test de 100 preguntas y,
• 2 exámenes orales.

Los exámenes orales me han resultado complicados desde la carrera (soy una persona muuuuuuuuuy nerviosa y eso me afecta muchísimo) pero a lo largo de la oposición y con el apoyo de los preparadores vas aprendiendo a enfrentarte a esos nervios y también es posible superarlos. Yo he tardado como año y medio en hacerlo (antes me ponía malísima de la barriga el día del cante) pero al final consigues encontrar el equilibrio.

Sí, voy a un preparador una vez a la semana (aunque hay otras personas que van dos veces) y utilizo principalmente el temario de Carperi. Sin embargo suelo tirar más de códigos y leyes directamente a la hora de estudiar artículos.

¡Me paso la vida haciendo esquemas! Pienso que los esquemas proporcionan una estructura visual muy clara sobre el contenido de los temas y que eso ayuda muchísimo a la hora de identificar ideas principales, a memorizar, a integrar lo estudiado con un orden claro...

Para mí tiene muchísimas ventajas. A la hora de exponer un tema es fundamental no ir "como pollo sin cabeza", sino que es necesario un hilo conductor que integre los contenidos. Este hilo conductor es el que obtendremos con un esquema bien hecho.

Creo que cada uno debe identificar su sistema de estudio según su forma de ser, su personalidad y su concentración. Como dije anteriormente hay tantos sistemas como personas, y no creo que haya que calificar como “mejor” a ninguno de ellos. Dicho esto, lo recomendable (en teoría) es estudiar con calidad unas 8 h. diarias e invertir el tiempo restante en otras actividades que ayuden a desconectar como hacer ejercicio.

Yo pienso que llevar eso a la práctica es sumamente complicado. No somos máquinas y por lo tanto dependemos de muchas circunstancias externas para “funcionar” mejor o peor. Habrá días que estemos más cansados y echemos 10 h. sentados sin rendir más de 2 h.; habrá días que estemos 10 h. sentados y rindamos 10 h.; y habrá días que estemos 3 h. sentados y rindamos las 3 h.

Así que partiendo de todo lo anterior pienso que si se consigue mantener una rutina de estudio saludable en la que se estudien 8 h. diarias de calidad, genial. Pero si por el contrario, no somos capaces de mantener esa continuidad mental de estudio, cada uno deberá optar por las alternativas que mejor se adapten a él (y esto se comprueba probando)

Lo pensé seriamente una vez en enero del año pasado. Un día me levanté y me dije a mí misma que podía tomar otros caminos distintos, que en la oposición no se acaba el mundo y que no tenía por qué aguantar todo el sufrimiento que estaba acumulando.

De hecho recuerdo llamar a Harry (el oponovio) y decirle llorando que me dejaba la oposición y que me iba de Au Pair a Inglaterra para mejorar mi inglés. Él me respondió que le parecía muy guay el plan, pero que mejor tomase la decisión cuando dejase de llorar 😂😂😂. Efectivamente a los 3-4 días mejoré un poco el ánimo y decidí continuar. No creo que deba ser una decisión que se tome en caliente.

De forma menos seria pienso en dejarme la oposición cada vez que me suena la alarma por las mañanas. Las personas que se levantan a las 6 h. y a las 6:15 h. ya están estudiando, tengo claro que han vendido su alma al diablo COMO POCO.

Me motiva pensar que si apruebo, me levantaré cada día de mi vida para ir a trabajar a un Juzgado. A un lugar donde, dentro de lo que cabe, se ayuda a hacer del mundo un lugar menos injusto y menos malo. No hay día que pase que no me imagine así.

He tenido la suerte de no dar con nadie así, pero creo que a ese tipo de personas hay que decirles “muchas gracias por tu aportación, cierra la puerta al salir bye”. Y fin.

Como ya he dicho antes, más bien me visualizo trabajando de fiscal. El aprobado (por mucho que mis prepas me digan que tengo que ser optimista) todavía no lo contemplo hasta dentro de unos años 😂😂😂... soy negativa por naturaleza, qué le voy a hacer. Pero ojalá sea antes de lo esperado porque yo voy a luchar de todos modos para conseguirlo.

¡SÍ! Querría dar las gracias a todas las personas que hayan leído hasta aquí y sobre todo animarlas a seguir luchando por su sueño.

Los límites no existen y las limitaciones son solamente las que nos imponemos nosotros mismos. Hay que librarse de todos los “no puedo” y convertir esa energía derrotista en fuerza para superarnos a nosotros mismos.

TODOS SOMOS CAPACES DE CONSEGUIR LO QUE NOS PROPONGAMOS.

Muchas gracias @opodramatica. Ha sido un placer que nos cuentes tu situción y experiencias con esta oposición. Esperamos que a much@s #opocompis les ayuden tus palabras de ánimo. A los demás, gracias por visitar nuestra web. Recordad que disponemos de recursos y libros de esquemas que os serán muy útiles para estudiar vuestra oposición. Así que, ánimo y a por vuestro objetivo. ☺